jueves, 2 de noviembre de 2017

El batik y yo, capítulo 8: Blusa "Tailandia, qué hermosa eres" para Asun

La blusa que traemos hoy es una mezcla oriental 100%. La tela proviene del "botín" que me traje el año pasado de Tailandia y el patrón lo he sacado de un libro japonés que me compré y que estoy pendiente de comentar: "Negro básico" de Sato Watanabe.
Sin embargo, la mezcla es un poco extraña porque los modelos de este libro son todos en negro o en colores oscuros (el título no engaña) y la tela que he usado es muy colorida. Sin embargo, los patrones son tan bonitos y con líneas tan elegantes que creo que quedarían bien con cualquier tela.
Y la que he usado es esta:
Discreta no es, pero bonita, sí
El modelo original es este:
Sobriamente asimétrico
Y es que la cabra tira al monte porque, por mucho que me gusten las líneas sencillas, los estampados vistosos me pueden y más para el verano, mal que le pese a Doña Sato. Aunque, pensándolo bien, creo que le gustaría la variante: precisamente este modelo sin pinzas ni cortes hace que el estampado luzca en todo su esplendor.
¿Cuáles son los puntos fuertes del modelo? 
Como ya hemos dicho, las líneas simples y elegantes y el escote y bajo asimétricos, subrayados por una tela o cinta de otro color: en el modelo original beige sobre negro y en este caso, el contraste es entre tela estampada y lisa. La tela lisa es un retal de un vestido de mi madre de los años 70,  en perfecto estado y con un color que le va como anillo al dedo.
Si la busco especialmente, seguro que no encuentro un color tan adecuado
Esta vez, como es para una amiga y no para mi, me he saltado un poquito mi propósito de no comprar nada, pero vamos, que más que un salto es un ligero traspiés: he comprado un metro de cinta al bies para el escote y una cremallera invisible para el lateral.
La blusa no es nada difícil de confeccionar, salvo el remate del escote. Por mucho que he buscado y buscado no he encontrado ningún tutorial para que salgan bien los ángulos no rectos. Y por mucho que he cortado, planchado y plegado no había manera de que me quedara como yo quería, así que corté por lo sano, nunca mejor dicho, y ha quedado bastante presentable.
Un corte a tiempo es una victoria
Ángulo obtuso. Dalia también un poco obtusa, porque no ha acabado de quedar bien

Al final está bastante presentable
He cosido el exterior del bies a máquina y el interior lo he rematado a mano, para que quede más curioso y porque mi Asun se lo merece todo. También he rematado a mano la franja inferior de tela azul lisa
La cremallera lateral no es imprescindible, pero como la prenda es muy entallada, resulta más cómodo para ponérsela y quitársela.

Cada vez me quedan mejor las cremalleras invisibles
¡Espero que Asun disfrute mucho de esta prenda y nos sirva a ambas para recordar lo mucho que nos gustó Tailandia y lo bien que lo pasamos allí!
Entre tropical y playera. ¡Y el color es muy favorecedor!